Poema de desgarro
¡Cómo se desgarra el corazón que solo ama!
¡Cómo el olvido busca al olvido para odiarlo!
Si yo solo entiendo, ¿a quién por querer yo ofendo?
¿Acaso no sufre el que desea la Luna y por eso huye?
¿Por qué los demás no quieren al Sol amarlo?
Solo con ojos ciegos de envidia al amor se destruye
cuando del mar una lágrima dulce es solo lo que pretendo.
Me escondo detrás de la sombra del almendro
el que tanto entendió a mi corazón
el que incluso en las noches más frías me decía
que las flores duran unos días solamente
y que cuando el árbol está triste
estas se marchitan y mueren lentamente.
Aunque la mar digan que sea traicionera
no lo es más el que no admira su olor
su calma, su bravía y su esplendor
sus noches de luna llena o sus días de primavera
o simplemente cuando dos almas,
olvidándose hasta de las estrellas, declaran su amor.